Pasé un fin de semana en Vila Gale y quedé encantado. La habitación era amplia y cómoda, con una cama increíble. El desayuno era variado y delicioso, perfecto para comenzar el día. La tranquilidad del lugar me ayudó a desconectar completamente.

El entorno histórico donde se encuentra el hotel es simplemente encantador. Las habitaciones son amplias y cómodas, ideales para relajarse después de un día explorando. Me encantaron las instalaciones del spa, que ofrecen un espacio perfecto para desconectar y cuidarse un poco. Además, el desayuno es un festín de productos frescos y locales que te prepara para un largo día de aventura.

Una de las cosas que noté fue que algunas áreas del hotel podían estar un poco frías en invierno.

impresionante, impresionante, impresionante

Me quedé maravillada con la renovación del antiguo convento. ¡cada rincón rebosa encanto! Las habitaciones son amplias y modernas, con una cama king size que te abraza. Y no puedo dejar de mencionar el desayuno, un festín de productos frescos y deliciosos que te anima a explorar los alrededores.

Lo recomiendo ❤️❤️

No te pierdas el desayuno buffet, realmente es un festín de delicias locales y frescas que te preparan para un día de exploración.

Ambiente encantador
Desayuno excelente
Instalaciones de spa extraordinarias

Luz problemática
Poca variedad cena
Servicio de bar serio

Entorno histórico único, Spa con múltiples piscinas, Diseño arquitectónico notable

El acceso a la piscina no es del todo conveniente!!! Varias veces noté que el área de la piscina estaba demasiado concurrida, haciendo que la experiencia no fuera tan relajante como esperaba. Otros detalles como la falta de sombrillas y el control inconsistente de las actividades en el spa podrían ser mejoras necesarias.

Un hotel con encanto especial

Disfrutamos de un ambiente encantador, donde el personal siempre se mostró amable. Además, la piscina climatizada fue un lujo después de un día explorando la ciudad. La historia del convento enriquecía la experiencia.

Sin embargo, el check-in fue increíblemente lento. Esperamos más de 30 minutos para obtener las llaves de nuestra habitación, lo que no es ideal después de un viaje largo.

Las habitaciones son amplias y cómodas, perfectas para relajarse tras un día de exploración. La cama king size fue un gran acierto, ¡me sentía como en las nubes!

Sin embargo, noté que en lugar de un espejo frente al lavabo había una ventana, lo que dificultó un poco la rutina de afeitado. Además, el buffet de cena dejó mucho que desear con poca variedad y calidad justita, no vale la pena cenar allí. fue un poco decepcionante que tuviéramos que pagar un euro por una cápsula adicional de café, considerando que solo había dos en la habitación.

Un lugar con encanto

El hotel es increíble, la renovación del antiguo convento mantiene todo su encanto. Las piscinas son geniales, especialmente la exterior. Disfrutamos del desayuno, super variado y rico. El único pero es que el check-in fue un poco lento, tuvimos que esperar más de lo esperado, pero nada que arruine la experiencia.

una experiencia agridulce

La historia del edificio se respira en cada rincón, añadiendo un encanto especial a la estancia. La habitación era espaciosa con una cama oversized muy cómoda, perfecta para descansar después de un día explorando. Además, el café del desayuno estaba realmente delicioso, un inicio espectacular para cada mañana.

El proceso de check-in fue bastante lento y me hizo sentir algo frustrado después de un largo viaje.

La habitación era amplia y cómoda, ideal para descansar después de un día explorando los encantadores alrededores de la ciudad. El personal fue muy amable, siempre dispuesto a ayudar. El desayuno era variado y delicioso, con productos frescos locales que impresionan.

Me gustaría que tuvieran más opciones para las cenas, ya que el menú era algo limitado. noté que la limpieza de la habitación podría mejorar, especialmente en cuanto a la reposición de algunos artículos.

la piscina interior estaba algo fría. pero la arquitectura era impresionante y tenía vistas espectaculares. desayuno variado, con opciones calientes y frías. el personal siempre amable y servicial.

La habitación era muy cómoda y espaciosa, ideal para descansar después de un día explorando. La cama king size que pedimos era increíblemente grande y mullida. No había ruidos, así que dormimos de maravilla. Todo estaba limpio y moderno, se notaba que el hotel es relativamente nuevo, lo cual fue un gran plus. La ducha también estaba perfecta. En resumen, un buen lugar para relajarse.

El wifi era rápido y el jacuzzi genial, pero la piscina cubierta estaba fría.